Por Marcos Grunfeld
El quinto día consecutivo de las negociaciones entre el Sindicato de los Peloteros y los dueños de la MLB tuvo un ingrediente adicional. El comisionado de la gran carpa, Rob Manfred, hizo acto de presencia en Júpiter, Florida, donde se efectuó la jornada de reuniones. El ejecutivo había estado ausente en las cuatro sesiones anteriores.
El periodista Ken Davidoff captó el momento en el cual el directivo ingresó a las conversaciones por primera vez en toda la semana.
Y desde que arrancó el conflicto laboral, en diciembre pasado, el gremio de los jugadores y sus patronos se han acercado en uno de los varios puntos en discordia.
El reportero Evan Drellich explicó que el asunto del draft colegial está cerca de ser resuelto. Los ejecutivos de Las Mayores desean que sean las primeras cuatro escogencias las sujetas a la lotería. La contraparte ha sugerido que sean los primeros siete elegidos los que se integren al sorteo.
El draft colegial es el proceso anual de los mejores reclutas de las universidades y colegios de los Estados Unidos, Puerto Rico y Canadá. El sistema ha beneficiado a los elencos que quedan con peor récord en la temporada previa. Y eso ha causado que muchos clubes no compitan adrede para elegir primeros.
El comunicador de The Athletic no supo detallar cuál será el punto medio en ese aspecto, pero todo indica que es posible que el sábado sea concluido esa condición entre los involucrados.
Drellich también explicó que Manfred solicitó a los peloteros que le dieran el poder para aplicar más rápido nuevas reglas de juego, como por ejemplo el reloj que limita a 20 segundo el tiempo que tiene el lanzador para acomodarse entre pitcheo y pitcheo. La petición no cayó bien.
En el actual convenio, el comisionado debe proponer cualquier cambio y las puede aplicar un año después.
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El acercamiento en este tema es una buena noticia porque han podido conciliar al menos en uno de los temas.
Pero el camino que queda aún es largo porque falta definir el nuevo salario mínimo, el nuevo umbral del impuesto al balance competitivo y lo que ocurrirá con los peloteros en prearbitraje.
(Marcos Grunfeld)
