Por Marcos Grunfeld
El regreso de Gleyber Torres parece un hecho y es una gran noticia para los Yanquis de Nueva York. El camarero ha tenido momentos importantes en mayo, pero había demorado en lograr la consistencia con su ofensiva. Eso es lo que ha conseguido en sus últimos seis compromisos en donde exhibe .409 de promedio al disparar nueve hits en sus últimos 22 turnos.
El segunda base duplicó en la velada del martes y pegó su cuarto doble de la contienda en la victoria de los Mulos del Bronx sobre los Orioles de Baltimore con pizarra de 5 por 4. En la jornada también anotó una carrera y en la última semana ha llevado su promedio de bateo de .222 a .250, gracias a su despertar ofensivo.
El caraqueño solo se ha ido en blanco en una ocasión en sus últimos siete partidos, en ese lapso suma un cuadrangular, un tubey, cuatro anotadas y cinco empujadas. Este mes también ha protagonizado dos momentos importantes. El 8 de mayo dejó en el terreno a los Rangers de Texas con un cuadrangular y el 11 de mayo empujó cinco carreras ante los Azulejos de Toronto, producto de un sencillo y otro bambinazo.
Aunque en el intermedio de ambos eventos sufrió un slump en donde pegó solo dos incogibles en 19 turnos y en ese lapso bateó apenas para .105. Pero estaba dando señales de su despertar y parece que ese momento finalmente llegó.
La seguidilla también le ha permitido aumentar su OPS de .654 a .741 en tan solo una semana.
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(Marcos Grunfeld)