Por Marcos Grunfeld
El slugger Salvador Pérez parece dar señales de vida con su bate después de un enorme y prolongado slump con el cual arrancó la temporada 2022. El valenciano ha disparado hits en cinco de sus últimos seis compromisos, incluyendo un sencillo que pegó en la jornada del jueves en la cual su club cayó derrotado contra los Rangers de Texas con pizarra de 3 por 1.
El carabobeño reúne ahora ocho imparables en 25 turnos y exhibe un promedio de .320 desde el 8 de mayo. El embajador vinotinto también ha recuperado su poder, en parte. En ese recorrido ha soltado tres dobles, aunque tiene bastante rato sin sacarla del parque porque no conecta un cuadrangular desde el 22 de abril.
«Esto es parte del juego», sentenció el receptor al Kansas City Star, hace un par de días, consultado sobre su discreto rendimiento con el bate. «Es bueno que tenemos oportunidades a diario. Solo necesitamos hacer ajustes y hacerlos rápido. Hay que pasar la página para ayudar al equipo a ganar juegos».
La última buena racha del venezolano empieza después de no haber soltado cohetes durante cinco compromisos. De hecho, en un lapso de nueve cotejos entre el 26 de abril y el 4 de mayo apenas reunió dos imparables en 38 turnos, con un doble y promedio de .053.
«He tratado de ser paciente y no ser súper agresivo», añadió. «También he intentado de aprovechar lo que el otro equipo me deja hacer. Si me dan un boleto, lo tomo. Si me dejan pegar un hit a la banda contraria, trato de hacerlo. No voy a dar un Grand Slam todos los días ni en cada turno que tenga al bate».
Hay buenas señales para el catcher porque incluso en tres de sus últimos seis compromisos ha logrado duplicar.
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(Marcos Grunfeld)