Por José Ángel Rodríguez Suárez
Unas imágenes de Miguel Cabrera esta semana volvieron a reflejar la grandeza que profesa sobre un terreno de juego. Aunque, en esta oportunidad, las instantáneas no fueron por algún nuevo hito estadístico. Tampoco por un homenaje recibido, como los que acumula en todos los parques en los que ha jugado esta temporada, la de su adiós como pelotero activo.
La leyenda venezolana compartió en la reciente serie de tres juegos entre los Tigres de Detroit y los Yanquis de Nueva York con tres jóvenes connacionales: Oswaldo Cabrera, Oswald Peraza y Everson Pereira. Totalmente despojado del egoísmo competitivo, por tratarse de sus rivales, Miggy les dio un sabio consejo durante los minutos que intercambiaron conceptos, previo al segundo compromiso.
«Nos dijo que él nunca trata de batear jonrones, porque no se considera ese tipo de bateador», reveló el utility mulo Oswaldo a YES Network. «Cuando se acerca al plato, intenta conectar la bola hacia el jardín derecho y central, ese es su enfoque siempre».
El trío de nóveles del equipo neoyorquino se viralizó el martes por su máxima atención hacia el oriundo de La Pedrera, mientras conversaba con ellos. Desde entonces, la incógnita sobre cuál había sido el contenido de aquella charla había quedado en el aire, hasta este jueves, cuando la cadena de televisión la despejó.
ADMIRACIÓN ABSOLUTA
Entre los bisoños del conjunto de la Gran Manzana que tuvieron esa genuina clínica de beisbol con Miguel Cabrera, el que mayor emotividad mostró fue Oswaldo.
«Estaba tan emocionado que, en mi mente, casi estaba llorando. Si no hubiese tenido cámaras cerca, probablemente hubiese llorado de la felicidad», afirmó al New York Post el multifacético jugador, sobre el primer duelo de la serie, cuando defendió la tercera base y compartió dentro de las rayas de cal por primera ocasión en su carrera con el aragüeño. «Es una leyenda en Venezuela. Era uno de mis héroes en mi niñez. Estar en el mismo campo con él significa mucho”.
“La primera vez que lo vi en el plato fue un momento increíble», continuó Oswaldo. «Casi se me salieron las lágrimas. Pero al mismo tiempo pensé: ‘Está bien, tenemos que hacer esto'».
LEE TAMBIÉN:
¡El primer 30-60! Ronald Acuña escribe la historia en la MLB
(José Ángel Rodríguez Suárez)
Foto: @MLBVenezuela
Ayuda a que El Emergente no se pierda un juego.
Colabora con este proyecto en la página patreon.com/IgnacioSerrano. O apóyanos con cualquier monto a través de paypal.com/ignacioluiserrano.