Por Marcos Grunfeld
Parece que Oswaldo Cabrera no se cansa de dejar una excelente buena impresión en los Yanquis de Nueva York. El mánager Aaron Boone no ha tenido otra opción que buscarle cualquier lugar al mirandino para que esté en el lineup debido a lo que aporta.
Este martes fue ubicado como jardinero izquierdo, por primera vez en su carrera, desde el inicio del encuentro. Ya el patrullero e infielder había defendido un ratico la posición el pasado 16 de septiembre, día en el que cubrió tres lugares diferentes.
Por supuesto, no desaprovechó la oportunidad para destacar allí: el jardinero Greg Allen dio un soberbio batazo al jardín izquierdo, en el cuarto inning. Las bases estaban llenas y había un solo out. Lo que pudo ser un Grand Slam o un doble barre bases, fue solo un elevado de sacrificio.
La jugada pasó después a un segundo plano porque al final Aaron Judge disparó su 60º jonrón del año, convirtiéndose en el primero pelotero en dos décadas en llegar a esa cifra. La tropa de Aaron Boone terminó remontando un déficit de cuatro carreras, en el noveno capítulo, con un Grand Slam de Giancarlo Stanton.
Pero Oswaldo Cabrera puso su gran de arena, no solo evitando ese bambinazo sino que después dio un tremendo tablazo por el jardín central que estuvo a punto de irse. Los guardabosques de los Piratas no pudieron retener el batazo, y aunque fue anotado error, el venezolano llegó a la tercera base.
El mirandino terminó anotando la primera rayita de su club y pisó el plato una vez más en el compromiso, pues más adelante negoció un boleto.
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DATO. También hay que hablar de Gleyber Torres porque duplicó por cuarta vez en siete juegos y llegó a nueve encuentros dando al menos un hit.
(Marcos Grunfeld)
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