El vals de Brummett. Tyson Brummett impuso el ritmo del juego a partir del tercero. Hasta entonces, Aragua parecía capaz de hacerle daño; le sonaron un doble y una línea de frente en el primero, más dos sencillos en el segundo acto. Los ponches seguidos a Jorge Cortés y Luis Maza, que se unieron al ponche a Luis Hernández para cerrar el tramo anterior, indicaron qué era lo que venía.
Fuera de control. Los Tigres, abajo por 2-0 desde el segundo, se mantenían a tiro de los Tiburones a pesar de fallar Yohán Pino. Pero el veterano Carlos Vásquez llegó descontrolado. Con dos boletos que entregó, permitió el inicio del desastre. José Rada y Ryan Glyn no lo pudieron contener y con sólo dos imparables, los escualos anotaron tres veces, para enfriar el partido.
Samba pa’ Tyson. La ofensiva litoralenses no se detuvo, mientras desfilaban por la lomita los integrantes del bullpen B rayado. Las cuatro anotaciones del sexto acabaron con el duelo y el único atractivo que quedó fue admirar hasta dónde llegaría Tyson Brummett, con sus envíos quebrados y su blanqueo. Completó siete actos y se fue entre aplausos, con el trueno de la samba.
Publicado en El Nacional, el sábado 28 de enero de 2012.