Por Marcos Grunfeld
El lanzador Eduardo Rodríguez confesó en noviembre pasado que su colega y compatriota Miguel Cabrera jugó un rol importante en su decisión de aceptar una oferta de 75 millones de dólares y cinco años por parte de los Tigres de Detroit. El futuro miembro del Salón de la Fama hizo el cabildeo para convencer al zurdo para que se convirtiera en el as de los bengalíes y lo consiguió.
El monticulista ahora tendrá el lujo de estar en la primera fila cuando el inicialista y bateador designado se convierta en el primer pelotero del país en entrar al club de los 3.000 imparables.
«Para mí es algo especial y también para mi país», admitió el escopetero al Detroit Free Press. «Yo sé lo que él significa para Venezuela. Será muy especial ser parte de esto y estoy agradecido por poder apreciarlo. No puedo esperar la hora de que eso ocurra».
El aragüeño llegó a 2996 indiscutibles en su carrera en la jornada del martes frente a los Yanquis de Nueva York. El slugger le disparó un sencillo al jardín central al as de los Bombarderos, Gerrit Cole, para acercarse a cuatro cohetes del momento histórico.
«Estoy seguro que todo el país va a estar viendo el partido en donde estará buscando un hit o dos para lograrlo», añadió. «Así de grande será estar en Venezuela cuando él consiga la hazaña. Él es el número uno de allá».
Miguel Cabrera se convertirá en el séptimo jugador de la historia con 3.000 indiscutibles y 500 jonrones junto a Hank Aaron, Willie Mays, Eddie Murray, Rafael Palmeiro, Albert Pujols y Alex Rodríguez. Entre esos nombres solo Pujols y Aaron también tiene 600 dobles. A ellos se les unirá el maracayero cuando pegue su próximo tubey y los cuatro inatrapables que le faltan para el prestigioso club.
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El reporte del Free Press también añade un dato interesante: Cabrera apenas ha enfrentado 15 veces a Eduardo Rodríguez con un promedio de .231, con apenas 3 hits, 2 boletos y cinco ponches. El siniestro no ha sido víctima de ningún extrabase de su paisano.
(Marcos Grunfeld),