Ronald Acuña Jr. escribió una carta en The Players Tribune en la que contó “la historia” que ningún periodista le preguntó. Habló de su infancia, encariñamiento con el beisbol, cómo llegó al profesional y el proceso para convertirse en el mejor jugador de las Grandes Ligas.
Y lo hizo desde el punto de vista emotivo. Contó “cosas que nadie sabía. Ni siquiera mis padres”, como por ejemplo que “le pedía a Dios desde niño que quería ser famoso”, pero que también estuvo a punto de renunciar a su sueño de ser beisbolista.
“Quería convertirme en un jugador profesional más que nada. Y cuando tenía unos 15 años, iba a una prueba tras otra con diferentes equipos, con la esperanza de conseguir un contrato”, aseguró Ronald Acuña Jr. “Después de un tiempo, se volvió muy frustrante porque siempre era lo mismo. Bateaba bien, lanzaba bien y corría rápido, y luego me decían: ‘Sigue trabajando duro. Siga mejorando y tendrá noticias nuestras. ¡Te llamaremos!’».
El actualmente MVP de la Liga Nacional afirmó que llegó el momento en el que dijo a su madre que no deseaba ir a más pruebas y hasta consideró en no jugar más. “Casi pierdo mi sueño”, afirmó.
“El scout de los Bravos Rolando Petit me dijo que me iba a firmar esa noche y no lo creía. Después iba en el transporte a Caracas y lo siguiente que me enteré es que ya era profesional. El único que no lloraba era mi papá. No es tan sentimental como el resto de nosotros. Sin embargo, mi mamá lloró lo suficiente por dos personas”, siguió el venezolano.
SIN OFENSAS
Otro de los puntos que Ronald Acuña Jr. explicó en The Players Tribune fueron las críticas por sus celebraciones en el campo. Señaló que hasta su madre le pidió en su momento que las detuviera y, aunque lo intentó, afirmó que no puede contenerse. También que no desea ofender a nadie.
“Pero no sé qué decirte. Simplemente hay algo en mí que me hace reaccionar en esos momentos. Si consigo un hit importante… es difícil reprimirlo, ¿sabes a qué me refiero?”, expuso. “Viene de mi interior. No quiero hacer daño, lo juro. Sólo quiero hacer feliz a la gente y ganar”.
Mientras que la lesión que sufrió en 2019 se convirtió en el reto más grande en su vida. No solo amenazó su carrera, sino que también lo puso a prueba como ser humano. “Quería estar jugando. No podía aceptar no estar allí. Pasaron unos tres o cuatro meses con depresión y finalmente tuve que ir a terapia. Estaba sufriendo mucho y necesitaba salir de ello”, aseguró.
Ahora, sano y transformado en una estrella, Ronald Acuña Jr. ve el futuro con entusiasmo. “Entonces, gracias a Dios que me mantiene saludable, pude ganar un MVP el año pasado. Pero ahora espero, con el favor de Dios, ganar otro”, cerró.
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Ronald Acuña Jr. explicó que las barreras del lenguaje fue uno de los aspectos más complicados durante su estadía en las Ligas Menores. “Un día comía pollo y al siguiente arroz chino. Era lo único que sabía ordenar en inglés”, expresó el pelotero.
Foto: @MLBVenezuela
Nadie sabe lo difícil que es el béisbol hasta el color de la piel, muchas veces los peloteros no se explican en el momento de ser agente libre donde dan todo ,pero el sueño no termina en la. Mlb , siguen poniendo ganas , metiendo mano cuando la. Meta es llegar a ser grande .