José Azócar salió como emergente en el séptimo inning del juego de este miércoles, lo hizo bien, y responde así a la confianza que Mike Schildt deposita en él.
El venezolano se fue de 1-1 con una impulsada, su primera del año, para poner su línea ofensiva de la temporada en .364/.417/.364 con tres anotadas.
Ya cavilaba Shildt sobre José Azócar en la primavera. «Sugar (como lo apodan) tendrá muchas oportunidades este año», le dijo el timonel al San Diego Union-Tribune. «Nos ha ayudado los últimos dos años y conoce el nivel de la Liga… y ahora tendrá más oportunidades».
Y el venezolano la aprovechó este miércoles cuando soltó un cañonazo que salió a 100,1 millas del bate y fue a caer a terrenos de nadie en el jardín derecho.
El venezolano pudo hacer el roster para la gira por Corea del Sur, donde en uno de los juegos pudo soltar su primer hit del año.
Luego ha jugado de manera regular en casi todos los encuentros y aunque pasó cuatro partidos al hilo sin producir, el venir de la banca este martes lo ayudó a acabar con dicha sequía.
Azócar no ha podido aún robarse una base, se ha ponchado en tres ocasiones y sólo ha podido negociar un boleto.
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Aunque en los últimos siete juegos, el venezolano solo viajó en cinco ocasiones al plato, ha podido conectar un par de hits, llevar una para la casa y anota otra carreras, de allí que su promedio sea de .400 en el mencionado período.
Foto: @JoseAzocarFans