Por Marcos Grunfeld
Los Caimanes de Barranquilla rompieron la mala fortuna que arrastraban en las dos ediciones pasadas de la Serie del Caribe. El estratega José Mosquera encaminó a Colombia a su primer triunfo en la historia del certamen después de vencer a Venezuela 6 por 1 en el Estadio Juan Marichal de la capital de República Dominicana.
«Era nuestro primer objetivo después de dos años difíciles», celebró el piloto al término del encuentro. «Sabíamos que era un equipo difícil. Estamos contentos por lo que se dio”.
El timonel contó con un gran trabajo de su cuerpo de relevistas después de que el abridor Eduar López apenas pudiera sacar cinco outs. El escopetero estuvo descontrolado y dio tres boletos en apenas 1.2 entradas de labor. Para su fortuna, sus rivales batearon cuatro veces para doble play por lo que pudieron salir de cualquier inconveniente.
“Fue una decisión difícil sacar a Eduar», reflexionó Mosquera. «Pero es la importancia de conocer a tu equipo. Yo identifiqué que estaba fallando muchos pitcheos. Y la comunicación con Sandy (León) fue importante”.
Una vez terminada la labor de López, sus sucesores completaron siete capítulos de una sola rayita. Los apagafuegos de la nación neogranadina solo toleraron tres imparables en 7.1 entradas. Los monticulistas se apoyaron bastante en la defensa porque no poncharon a nadie y concedieron cinco pasaportes.
«Vi mucha entrega hoy», siguió el mánager de los Caimanes. «El equipo salió a ganar».
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Los barranquilleros contaron con sus dos figuras más importantes Reynaldo Rodríguez y Harold Ramírez que se combinaron para seis hits en diez turnos y par de fletadas.
“Muchos de los pitchers de Venezuela han lanzado en Colombia y ya los conocíamos”, agregó el estratega. “Mientras mantengamos nuestro enfoque. El resultado es algo que no podemos controlar, pero sí nuestra energía. Lo que tenemos que hacer es jugar fuerte”.
(Marcos Grunfeld)
