Los nuevos importados del Caracas se alistan para entrar en acción y el recién llegado inicialista aseguró que desde sus tiempos con Anzoátegui le atraía la idea de jugar con los Leones
Danny Dorn en su etapa con Caribes |
Danny Dorn conoce muy bien la liga, porque jugó con los Caribes la temporada pasada. Pero fueron los cuentos de sus amigos Matt Maloney y John Atkins los que le convencieron de firmar con los Leones para esta temporada.
“Ellos jugaron aquí (con los Navegantes) y me contaron cómo es ese ambiente que se da en los juegos entre Caracas y Magallanes”, sonrió Dorn, el último importado de la segunda avanzada en llegar para los melenudos, la noche del lunes. “Sólo he oído cosas buenas de esos encuentros”.
El jardinero e inicialista ha estado practicando junto con sus nuevos compañeros, incluyendo al pitcher Tom Mastny, quien pisó Maiquetía el domingo.
“Vine a sumar innings, a buscar consistencia y a trabajar en mi cambio de velocidad, que es un pitcheo que aprendí hace un par de años y quiero perfeccionar”, comentó Mastny, quien acumula tres campañas de experiencia como relevista de los Indios de Cleveland y una reciente pasantía por Japón. “Me es igual ser abridor o relevista, sólo quiero ayudar”.
El manager Dave Hudgens indicó que el serpentinero engrosará la rotación. El martes únicamente soltó algunas pelotas y ahora comenzará el proceso de “construir el brazo”, sumando sesiones de bullpen y yendo después a la paralela.
“Va a ser grato ser dirigido por Dave”, sonrió Mastny. “Lo conozco de Cleveland, porque él allá es coordinador de ligas menores. Hemos hablado mucho y al parecer aquí ha sido un piloto exitoso”.
Dorn trae sólidos números de triple A, donde dejó una línea ofensiva de .302/.398/.545 en la filial de los Rojos de Cincinnati.
“Me fracturé una mano y necesito sumar turnos”, explicó el toletero, cuyo debut esperará al menos hasta el martes. “Estuve entrenándome por mi cuenta y me fue bien en la práctica regular de bateo, pero después, en el juego simulado (que lanzó Brian Baker el martes) fue más difícil. Tengo entendido que iré a la paralela, a ponerme a tono”.
Mastny espera con entusiasmo el momento de lanzar frente al público venezolano: “Me han dicho que se involucra mucho, con cada pitcheo; eso me gusta, me da energía, estén a mi favor o en mi contra”.
Dorn también cuenta las horas para empezar. Lo hace, al parecer, desde hace mucho tiempo ya.
“Desde que estuve con Caribes y conocí este estadio y este público”, confesó, “me dije que quería jugar con el Caracas”.
Nick Weglarz, Thad Weber y Josh Wilkie averiguaron pronto cómo es la liga. A los tres les gustó lo que vieron en la gira de los Leones y en el Universitario. Ahora le tocará a Wilkie ser el primero en probar la acción dentro del diamante, pues fue inscrito en el roster de 32 del manager Dave Hudgens y engrosó de inmediato el bullpen.
«Sólo paré una o dos semanas, después de la temporada en triple A», dijo Wilkie, quien viene de lanzar 53 juegos, 52 de ellos como relevista, en la principal sucursal de Washington, con 2.45 de efectividad y 1.13 de WHIP. «Estuve lanzando bullpen y tiré práctica de bateo en vivo con el equipo de mi universidad. Estoy en forma».
Weglarz tomará unos turnos en la paralela y Weber hará dos sesiones de bullpen y una práctica de bateo en vivo, antes de ir a la Liga de Desarrollo a hacer una apertura.
«Me tomará unos 10 días para estar listo», explicó el derecho de Detroit, que tuvo 3.80 de efectividad y 1.23 de WHIP entre doble A y triple A este año. Los tres recién llegados del Caracas se unieron a Josh Kroeger, quien ya entró en acción, y a los monticulistas Bateman y Brian Baker, quienes tienen más de una semana en el país, y los últimos integrantes de la segunda avanzada de importados melenudos, formada por Tom Mastny y el slugger Danny Dorn.
Weglarz, Weber y Wilkie ya están encantados con lo que han visto en las tribunas. «Es extraordinaria, toda esa energía», sonrió Weber. «Jamás había estado en una liga donde los fanáticos estuvieran tan involucrados con cada pitcheo».
«Una vez estuve en República Dominicana, cuando jugué beisbol menor, pero no tiene nada que ver con esto», terció Weglarz, quien viene de sacar 20 cuadrangulares y poner una línea ofensiva de .285/.390/.503 entre las sucursales doble A y triple A de Cleveland.
Wilkie es relevista, aunque está dispuesto a ayudar en lo que le pidan. No trae limitaciones, aunque planea irse en Navidad, para no regresar.
«Vine a sumar innings», relató el apagafuegos. «Va a ser muy bueno estar en un bullpen con grandeligas como Gutiérrez y (Henry) Rodríguez. Te da experiencia, enseñanzas y, sobre todo, te hace sentir un bigleaguer, como ellos, y te da más ganas para ser mejor».
Weber, cuando esté listo, únicamente podrá recorrer cinco innings o hacer 75 envíos por apertura, por orden de Detroit, pero podrá quedarse hasta el fin. Weglarz también.
«No vine a trabajar una herramienta en participar», comentó el jardinero. «Quiero perfeccionar mi juego, en general, y mi selección de pitcheos en el plato».
Brian Baker hizo el martes su antepenúltima sesión preparatoria, antes de debutar con los Leones. “Lanzará otra práctica de bateo en vivo y quizás haga una aparición en la paralela”, comentó el manager Dave Hudgens, luego de que el derecho se midiera a Danny Dorn, Daniel Mayora, José Duarte y Raúl Padrón, en el Universitario. “Relevará a (Sam) Narron el domingo y quizás después esté listo para la rotación. Tomará el puesto de (Chad) Reineke, luego de la última salida de éste”. Reineke se despide contra el Magallanes, el sábado, pero no será ese el único cupo que quede disponible en la rotación: también saldrá Víctor Lárez, lo que permitirá que también ingrese al quinteto Gustavo Chacín.
Publicado en El Nacional, entre el domingo 7 y el miércoles 10 de noviembre de 2010.
¿A Víctor Lárez es que lo mandaron a dejar de lanzar?
Tenía un límite de sólo cinco aperturas. Están tratando que se quede como relevista.