El jardinero Joc Pederson dijo que quería quedarse en Los Ángeles, que los Dodgers lo sabían, pero que en la organización no estaban interesados en él.
Ahora a los Dodgers les toca sufrir por él.
«Básicamente», le dijo Pederson al periodista Andy McCullough del sitio The Athletic, que el mensaje era: «no vamos a estar contigo».
Pederson recordó que al llegar el primer día de la agencia libre, Andrew Friedman, presidente de operaciones de béisbol de los Dodgers, lo llamó para despedirse y no para conversar de su nuevo contrato.
«Había muchos otros equipos que me hacían ofertas justas con el mismo tipo de acuerdo», dijo Pederson. “Si iba a ser un jugador del montón, estaría en un equipo que competía en los playoffs. No quería formar parte de un pelotón en un equipo que no pensara que iba a estar en los playoffs ”.
Pero Pederson no se sorprendió. No sospechaba que los Dodgers no confiarían en él para jugar todos los días.
Firmó con los Cachorros. Atlanta lo adquirió en julio para mitigar la pérdida de Ronald Acuña Jr. Y en pocos turnos al bate en los playoffs ha mostrado a todos en su nueva ciudad por qué sus compañeros de los Dodgers lo apodaron «JOctober», por un juego de palabras con la palabra en inglés de este mes decisivo, “Octubre”.
Pederson no fue el único Dodger que recibió una llamada de Friedman cuando la agencia libre abrió la temporada baja pasada.
Los Dodgers sabían que Pederson poseía este tipo de carisma. Sabían cuánto lo apreciaban sus compañeros. Clayton Kershaw fue uno de los varios ex compañeros que abrazaron a Pederson durante la práctica de bateo antes del segundo juego de la NLCS.
Sabían cómo su bate podría catalizar una alineación en esta época del año. La organización aún lo dejó ir.
Friedman hizo lo mismo con el boricua Kike Hernández. Le ofreció el mismo mensaje de agradecimiento y despedida que le dio a Pederson.
Casi un año después, las decisiones parecen mal calculadas. Pederson ha encendido la ofensiva de Atlanta, mientras que Hernández ha llevado a Boston a ondear el banderín.
Los Dodgers podrían haber traído de regreso a Hernández y Pederson. El costo probablemente habría excedido el contrato de Pederson por un año y 7 millones de dólares con los Cachorros. Y el contrato de Hernández fue por dos años y 14 millones de dólares.
Pederson dijo que habría considerado tomar otro acuerdo con los Dodgers. Su mercado no se desbordó con ofertas plurianuales.
A principios del invierno, según Los Angeles Times, rechazó una oferta de un año de los Medias Blancas por valor de al menos 10 millones de dólares. Después de eso, la mayoría de las propuestas se mezclaron.
Pero los Dodgers podrían haber pagado el dinero adicional para persuadir a Hernández y Pederson para que se quedaran. Cualquiera que sea el precio para 2021, habría sido menos dinero que los 38 millones dedólares anuales que el equipo pagó a Trevor Bauer, ausente de manera definitiva desde mediados de campaña.
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