Franklin Gutiérrez consecha un primer e importante reconocimiento por su defensa. ¿Es el primer paso en el camino hacia el Guante de Oro?
Esta semana ocurrieron dos noticias que podrían ser la antesala de grandes novedades. Por un lado, Franklin Gutiérrez fue señalado por la Biblia del Fildeo como el mejor jardinero central de las mayores, un abreboca de lo que podría ser el primer Guante de Oro en la carrera del caraqueño. Dos días antes, los Tiburones levantaron un encuentro que perdían 15-6 y ganaron 18-17, en una muestra de lo que directivos, uniformados y fanáticos anhelan: un punto de inflexión que termine por dividir en dos la temporada.
Lo del “Guti” es un buen augurio. La Biblia del Fildeo es poco conocida fuera de Estados Unidos, pero cada vez mas periodistas en el norte utilizan como referencia sus estudios.
Es el producto de una serie de investigaciones nacidas del legítimo cuestionamiento que Bill James y sus seguidores hicieron a la forma tradicional de medir la defensa: tenía que existir algo más preciso que contar errores, chances o dobleplays, así como ha quedado claro que los mejores bateadores no son necesariamente quienes tienen más empujadas ni los mejores pitchers aquellos que reúnen más triunfos o rescates.
El resultado de esa búsqueda es un maravilloso campo donde florecen nuevas estadísticas, que calculan cuántas carreras potencialmente evitó o facilitó cada quien con el guante y cuál es el verdadero alcance y efectividad de todo defensor.
Esto ha sido posible gracias al extraordinario aporte de la tecnología. Así como hoy MLB.com permite apreciar, gracias a un programa de computadora, cómo rompe cada envío, lo que a su vez permite que FanGraphs.com ofrezca el total de rectas, sliders, curvas o sinkers que tira por juego y por temporada cada pitcher, mediante la ayuda de esas muchas cámaras que hoy se colocan en el terreno hoy podemos apreciar los “intangibles” de la defensiva, en busca de respuestas a esas preguntas legítimas: ¿cómo medir la eficiencia verdadera de un campocorto en un equipo de pitchers que permiten elevados, respecto a otro que milita en una escuadra con especialistas del sinker? ¿Cómo saber si es verdad la conseja de los años 70, según la cual David Concepción cometía más errores que Larry Bowa sencillamente porque cubría más terreno, porque llegaba más lejos y, en consecuencia, hacia jugadas de mayor riesgo que su rival de época?
Es imposible ir al pasado, puesto que la magia de esto radica en la reciente colocación de cámaras en muchos ángulos, para cargar la data del play-by-play de cada equipo. Ni siquiera es posible saber las cifras totales de un Omar Vizquel, puesto que los estudios se remontan sólo a mediados de la presente década, ya que antes no se colocaban en el campo las benditas cámaras. Aunque algún día podremos comparar a Alcides Escobar y Elvis Andrus con los mejores de su tiempo y saber si realmente se convierten en los torpederos más seguros de las grandes ligas. Eso sí.
Gutiérrez es el mejor fildeador de las mayores. Únicamente el antesalista Chone Figgins le iguala en el total de carreras salvadas. Según la Biblia del Fildeo, ambos impidieron que le hicieran a sus clubes unas 31 rayitas.
El “Guti”, además, es el outfielder —y en general, el pelotero en todas las mayores— que cubre más terreno, de acuerdo con la medición de FanGraphs. Y entre 2006 y 2008, aun no jugando a diario, fue el rightfielder que más pelotas tomó más allá de su zona normal de custodia.
¿Resucitarán pronto los Tiburones, después de su épica reacción en Margarita? Ojalá. Aunque es imposible asegurarlo. Una “nueva ciencia” del análisis del juego, en cambio, apunta unánimemente a Franklin Gutiérrez como el próximo Guante de Oro de Venezuela.
Publicado en El Nacional, el domingo 1° de noviembre de 2009.
