Jon Nunnally, instructor de bateo de los Leones y veterana presencia en el beisbol invernal, no cree que su nuevo rol con los Indios de Cleveland le impida regresar
Al Jon Nunnally pelotero no le gustó la última oferta de los Indios de Cleveland en 2006, cuando contaba 35 años de edad.
“Me ofrecieron trabajo como coach y jugador”, recordó el instructor de bateo de los Leones del Caracas. “Respondí que no y me fui a México”.
El ex jardinero de los Caribes de Oriente y los Tigres de Aragua, veterano de 15 años, en el beisbol profesional, no temía a los nuevos retos.
“Les dije que me nombraran coach o me ofrecieran contrato como jugador”, continuó Nunnally. “Una cosa u otra, pero no las dos”.
Nunnally deseaba seguir en acción, aunque no temía al momento de colgar los spikes.
“Había aprendido a enseñar a los peloteros más jóvenes donde jugué, así que no fue difícil”, aseguró. Pero cuando dejó al Campeche en el circuito azteca, luego de 17 juegos, 3 jonrones y 12 empujadas, llamó a los indígenas y preguntó si aún estaban interesados en él.
Así nació el Jon Nunnally instructor.
“Me llamaron a una reunión en la que estuvieron Dave (Hudgens) y Tim Tolman”, rememoró el técnico, con una gran sonrisa. “Después de un rato, me contrataron. Así empecé”.
Nunnally fue asignado a la Liga de los Apalaches en ese mismo 2006 y el año siguiente fue subido a clase A avanzada. Después de dos temporadas en la categoría, Cleveland le llevó a triple A, donde labró su camino de regreso a las grandes ligas.
Cuatro campeonatos le bastaron para captar la atención de sus jefes. Así, cuando Manny Acta asumió como nuevo piloto de los Indios, el nombre del ex outfielder surgió como nuevo coach de bateo del equipo grande.
Al nativo de Pelham, Carolina del Norte, le entusiasma el nuevo reto. Estuvo en las mayores como jugador, entre 1995 y 2000, y confía en que la nueva tarea no le impedirá regresar.
Y es que Nunnally disfruta la pelota invernal.
“Adoro el beisbol aquí”, afirmó. “Se juega para ganar. Todos los encuentros cuentan. En las menores se trata de desarrollar condiciones, aquí no. Y amo esa competitividad. Cuando cada partido cuenta, todo es más emocionante”.
La experiencia con los Leones, en ese sentido, es inmejorable, aunque también recuerda con afecto su paso por Maracay y Puerto La Cruz.
“Con Caribes nunca fui a la playa, vine a hacerlo este año”, rió. “En Maracay me di cuenta del significado del beisbol aquí. Al salir del estadio, cruzando la calle, todo el mundo se ofrecía para llevarnos en su carro. Los aficionados llenaban el lobby del hotel y nos trataban como estrellas de rock”.
Con Aragua sacó 5 pelotas, pero no disfrutó la postemporada debido al paro que terminó con la 2002-2003. Antes de eso, bateó para .282 sin vuelacercas con Oriente, en la 99-2000.
“He disfrutado cada una de mis experiencias en Venezuela”, afirmó. “Ojalá que pueda regresar”.
El dato:
Jon Nunnally cree que Cleveland puede estar en los playoffs, lo que le impediría venir en septiembre. A Luis Ávila, presidente de los Leones, no le parece un impedimento, en principio. La continuidad del coach será evaluada
Publicado en El Nacional, el lunes 25 de enero de 2010.
