¿Quién recuerda ahora que Dave Hudgens tenía 15 años sin dirigir? El piloto caraquista regresó con éxito al rol de estratega. No se sorprendan si también regresa a Venezuela
PORLAMAR
La Navidad de 1983 fue una de las mejores en la vida adulta de Dave Hudgens.
El por entonces jonronero e inicialista de los Tigres de Aragua viajó junto con su familia a la costa aragüeña y pasó las fiestas decembrinas a la orilla del mar.
El hombre que ahora conduce a los Leones del Caracas en la Serie del Caribe no olvida su paso como jugador activo por la pelota invernal. A menudo subraya que aquí se aprende a responder bajo presión, y afirma que todo prospecto de grandes ligas debería venir a Venezuela.
“En las menores se aprende a batear, a correr, a lanzar, pero es aquí donde aprendes a ganar”, a firma a menudo.
Hudgens ha estado tres veces en el país y siempre ha sido noticia.
Fue colíder jonronero y bateó para .311 en el campeonato 1983-1984, en su primera incursión, con Aragua. Fue coach de bateo del Magallanes en la campaña 1994-1995 y terminó conduciendo a los turcos debido a la marcha de Tim Tolman. Y hace cuatro meses se reencontró con el cargo, un rol que parecía haber descartado en su larga carrera como técnico.
“Estaba esperando la oportunidad correcta”, nos respondió la vez que le preguntamos sobre los casi 15 años que estuvo dedicado, primero, a instruir en bateo, y luego, en el último lustro, a coordinar las granjas de los Indios de Cleveland.
Allí le encontró el Caracas, a mediados de 2009, en medio de la crisis que obligó al alto mando melenudo a viajar de emergencia a Estados Unidos, en busca de un timonel que cubriese la falta dejada por la renuncia de Frank Kremblas, dos meses antes de empezar los entrenamientos.
Luis Ávila, presidente de los capitalinos, tiene presente dos cosas de aquel viaje, que resultó providencial. La colaboración de los Indios, para ayudar en la búsqueda de sustitutos, tarea que compensó en parte las limitaciones que luego impusieron a los prospectos Héctor Rondón y Carlos Carrasco. Y lo otro, el talante de Hudgens.
“Dave es un profesional, una persona inteligente, que sabe lo que debe decir”, ha dicho Ávila. “Es un hombre de beisbol”.
Hudgens formó parte del staff de coaches de los Atléticos de Oakland entre 2003 y 2005, pero no quiso repetir la experiencia cuando Manny Acta vino a entrevistarlo, en diciembre. Prefirió que los indígenas contrataran a su pupilo Jon Nunnally y seguir en las menores de Cleveland.
“Me gusta lo que hago”, justificó con una gran sonrisa”. Y lo que hace le ayudó a labrar su éxito aquí. “No hay que olvidar que su trabajo en las granjas de los Indios es enseñar a otros managers más jóvenes”, razonó Ávila.
Hudgens debe regresar en la 2010-2011. Quiere hacerlo y los Leones, aunque no lo han confirmado, también lo desean. Manejó bien al grupo y ganó, como Kremblas. Fue mejor estratega y un muy educado analista del juego.
En diciembre veremos si este californiano de 53 años de edad regresa también a las playas en Navidad. Ahora lo hizo, y su pasantía por Los Roques sirvió para mostrar que también tiene sentido del humor.
“Demasiado ruido en el pueblo, toda la noche, pero hermosas playas”, describió. “Eso sí, deberían existir reglas para usar el hilo dental”.
El dato:
Dave Hudgens se retiró el año después de ser colíder jonronero en Venezuela. Fue en 1984, aunque sólo tenía 27 años de edad. En 1985 empezó a dirigir, en liga de novatos
Publicado en El Nacional, el miércoles 3 de febrero de 2010.
