El receptor fue cambiado por los Mellizos en el pacto que llevó a Matt Capps a Minnesota y pasó de estar en un equipo sin futuro a convertirse en el catcher del futuro en Washington. Un futuro que puede ser cercano
Los Mellizos sorprendieron al enviar a Wilson Ramos y un lanzador de ligas menores a Washington, a cambio del cerrador Matt Capps.
El movimiento puede ser criticable para Minnesota. Entregaron a uno de sus principales prospectos para adquirir a un relevista que, si bien se convertirá en el cerrojo de la divisa, en lugar de John Rauch, ya no tendrá ese rol en 2011, cuando Joe Nathan esté de vuelta.
Para Ramos es una buena noticia. No tenía futuro con los gemelos, bloqueado por la firma a largo plazo del astro Joe Mauer, y tampoco podía buscar una opción en la inicial, debido a Justin Morneau.
Los Nacionales cuentan con Iván Rodríguez al menos hasta el próximo campeonato y esperan que Jesús Flores se recupere, después de un largo proceso de rehabilitación que aún no termina. Pero el recién llegado se convierte, de inmediato, en la apuesta de largo plazo en la organización.
Ramos es un bateador temible, aunque ha sufrido un bajón en triple A, en 2010. Mejor aún, sus progresos con la mascota permiten creer que no deberá mudarse de posición para consolidarse en las grandes ligas.