Por Marcos Grunfeld
El bullpen de los Navegantes del Magallanes volvió a ser protagonista para que Venezuela diera un paso importante hacia la postemporada de la Serie del Caribe 2022. El estratega Wilfredo Romero necesitó cinco brazo para completar 6.1 entradas con nueve fusilados ante la artillería de los Criollos de Caguas de Puerto Rico.
“El relevo se portó a la altura», celebró el piloto. «Hicimos un poco de ajustes y logramos hacer las carreras necesarias”.
El timonel necesitó a sus bomberos desde el tercer acto después de que el zurdo César Jiménez fuera emboscado. El pitcher se descontroló en aquel episodio con tres wild pitch, un boleto y un hit para que los boricuas anotaran las dos rayitas que lograron en el compromiso.
Los norteamericanos tenían una seria amenaza con dos corredores a bordo y el empate en circulación. El piloto aragüeño apostó por Enderson Franco que salió de atolladero ponchando al grandeliga Roberto Pérez.
“Franco es un muchacho competitivo», atizó el estratega. “Desde el principio hubo burlas porque yo decía que tenía el mejor bullpen. Luis Carlos (Rivera) hicieron un gran trabajo haciendo los ajustes. Fue un trabajo extraordinario. Nos enfocamos en tener el mejor bullpen. La confianza que le dimos fue única. Bruce Rondón no comenzó como cerrador y terminó siendo el Cerrador del Año”.
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El ex grandeliga de los Gigantes de San Francisco retiró a siete de sus nueve oponentes y le siguieron Vicente Campos, Wilking Rodríguez, Anthony Vizcaya y Rondón. Entre los cinco apagafuegos completaron 6.1 capítulos en blanco, con dos hits, un pasaporte y nueve guillotinados.
«No hemos logrado nada todavía», concluyó Wilfredo Romero. «Nosotros hicimos los ajustes y hemos hecho una gran labor. Los que están jugando lo han hecho de manera única».
(Marcos Grunfeld)