Por Alexander Gómez
Los Padres de San Diego enviarán al dominicano Robinson Canó al equipo Chihuahuas de El Paso, sucursal Triple A de la Liga Costa del Pacífico antes del inicio de la serie en Milwaukee.
Según la reportera del equipo Annie Heilbrunn, el tiempo de Robinson Canó con los Padres de San Diego ha terminado, y agregó que el jugador de cuadro veterano rechazará la solicitud y se convertirá en agente libre.
Se esperaba que los Padres solicitarán el permiso de Canó para enviarlo a las menores el jueves, pero Canó tuvo suficiente tiempo de servicio para rechazar cualquier asignación opcional y elegir la agencia libre en su lugar.
Canó, de 39 años, firmó con los Padres a mediados de mayo luego de ser cortado por los Mets de Nueva York. Se unió a San Diego a mediados de mayo, y se fue de 33-3 con 10 ponches. No tenía hits en sus últimos 20 turnos.
Una vez más buscará un nuevo equipo mientras continúa luchando en 2022, de ser su última parada en las Grandes Ligas, se retirará habiendo acumulado promedios de .301/.351/.489 (125 OPS+) con 335 jonrones.
Con ocho participaciones al Juego de las Estrellas, cinco veces ganador del Bate de Plata y dos veces el Guante de Oro. Y terminó entre los cinco primeros en la votación del Jugador Más Valioso en cinco ocasiones distintas.
Un colaborador valioso con los Yankees de Nueva York, dejó la Gran Manzana por un contrato de diez años y $240 millones con los Marineros de Seattle en 2014.
Con tres Juegos de Estrellas en sus primeras cuatro temporadas con los Marineros, recibió una suspensión de 80 juegos en 2018 por dar positivo por furosemida. Considerado un agente enmascarador de PED.
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En 2019, después de haber sido canjeado a los Mets de Nueva York, su producción comenzó a caer, luego de la temporada recortada del 2020 después dar positivo por PED, siendo la sustancia en cuestión el esteroide estanozolol.
Y dado que esta era una segunda prueba positiva, se le impuso una suspensión de una temporada completa.
El 2 de mayo, cuando los Mets tuvieron que recortar su lista de 28 jugadores a 26, lo designaron para asignación. Lo que significa que estaban preparados para comerse los casi $45 millones restantes de su contrato. Una de las compras más grandes en la historia de las Grandes Ligas.
(Alexander Gómez)
