Por Ignacio Serrano
A.J. Hinch, manager de los Tigres de Detroit, finalmente dejó en la banca a Miguel Cabrera este miércoles, una pausa que, a su juicio, puede ayudarle a sacudirse el slump que sufre desde hace seis días.
Cabrera vio desde el dugout la derrota de su equipo ante los Reales de Kansas City, en una serie que resultó cuesta arriba para los felinos.
Aunque el nativo de Maracay pudo completar varios logros personales, escalando el puesto 16 de todos los tiempos entre los mejores empujadores de la MLB, los bengalíes perdieron tres de cuatro compromisos ante los monarcas. Así que la serie de deja, probablemente, mal sabor en la boca.
Cabrera solo ha dado un hit en sus últimas 25 apariciones legales, contando desde que fue a batear por última vez el jueves 7 de julio.
Aquella noche empujó tres carreras y cerró con un sacrifly. Era imposible prever lo que estaba por venir. Tenía 13 choques corridos con imparables, la cadena más larga para venezolanos en este torneo.
A partir del viernes 8 comenzó la sequía. Se fue en blanco por cuatro juegos seguidos, por primera vez en la temporada. Y sumando luego los siguientes dos choques, acumuló solo un hit en 21 turnos.
Su average cayó de .308 a .287 en el proceso. Llegó a ocupar la octava plaza en la Liga Americana antes del slump, su mejor posición en 2022 y en varios años.
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DATO. Miguel Cabrera no había tenido más de dos juegos en blanco en toda la campaña, antes de esta repentina caída. Su average es el más bajo desde el 22 de mayo, cuando tenía .276. Al día siguiente duplicó y comenzó la que ha sido su mejor etapa de esta justa. En los siguientes 35 juegos, a partir de allí, ligó para .341 en 136 apariciones legales.
(Ignacio Serrano)
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