Por Ignacio Serrano
La suerte de dos campocortos venezolanos, Gabriel Arias y Miguel Rojas, quedará impactada desde esta semana por el cambio que acaban de cerrar los Dodgers y los Guardianes.
Los Ángeles entregó al pitcher Noah Syndergaard para adquirir de Cleveland al shortstop Amed Rosario. Y eso le abre una puerta a Arias, al tiempo que puede estar cerrándosela a Rojas.
Rosario era el torpedero regular de los Guardianes. De hecho, desplazó al venezolano Andrés Giménez a la intermedia, a pesar de ser este último el mejor defensor de los dos. Ambos llegaron juntos en otro cambio, desde los Mets, y el dominicano siempre tuvo mejor proyección como bateador, con topes de 30 dobles, 15 jonrones, 11 robos y 9 tribeyes.
Es cierto que su potencial no ha florecido del todo y que Giménez ha terminado produciendo más que él. Pero el manager Terry Francona lo mantuvo como el campocorto de todos los días. Hasta esta semana.
Ahora Rosario pertenece a los Dodgers. Y eso tendrá consecuencias.
CHANCE PARA ARIAS
Arias puede ser el gran beneficiado por este movimiento. Fue uno de los principales prospectos de Cleveland, antes de llegar a las Grandes Ligas, y desde 2022 ha sido suplente en varias posiciones, sin llegar a ser titular.
Se abre ahora la oportunidad para que el aragüeño y el también joven Tyler Williams peleen por quedarse con la posición.
«Sentimos que esto tiene sentido para nosotros, que es el momento adecuado para darles mayores oportunidades a Gabby y Tyler», dijo a The Associated Press el presidente de Operaciones de Beisbol de los Guardianes, Chris Antonetti. «También queremos ser respetuosos con Amed. Reconocemos su lugar en nuestro equipo, como un líder veterano, y sus expectativas consigo mismo. La transición a un rol menor tendría un impacto en él y en el equipo, y éramos muy conscientes de eso».
Arias fue el shortstop titular este jueves. En esta primera oportunidad, se fue de 4-2, con una base por bolas.
¿CÓMO QUEDA ROJAS?
El caso de Rojas es el contrario al de Arias. El mirandino es el paracorto de todos los días en Los Ángeles, pero está claro que los Dodgers no adquirieron a Rosario por nada.
El nativo de Los Teques es un estupendo defensor. Tiene 1.3 de WAR defensivo en la cuenta de Baseball Reference, después de cerrar 2022 con 2.6. Son números excepcionales.
El problema con Rojas está en qué desea el manager Dave Roberts. ¿Le basta con su guante, su alcance y su ascendencia sobre los más jóvenes, que también es mucha? ¿O querrá añadir bateo a su alineación diaria?
Porque el venezolano tiene promedios de .221/.279/.268, con apenas .547 de OPS y ningún jonrón. Está en uno de sus puntos más bajos a la ofensiva. Su OPS ajustado dice que ha sido un bateador 51 por ciento por debajo de la media de la MLB. Y su bWAR como bateador también es negativo.
La situación es todavía un poco más ajustada, visto que los Dodgers también adquirieron de los Medias Rojas al súper utility Kike Hernández, esta semana. Al menos en las primeras de cambio, querrán probar a sus nuevas piezas en el infield.
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(Ignacio Serrano)
Foto: @marlins
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