Titular con el Caracas, acaba de firmar con Seattle. La buena defensiva del cumanés le allana el terreno no sólo en Venezuela; también en el norte
Jesús Sucre aprovechó una pausa en la práctica de bateo del Caracas, este viernes, para escurrirse en el clubhouse de su equipo y salir con una carpeta manila entre sus manos.
El receptor titular de los Leones en este inicio del campeonato recorrió los 30 metros que le separaban del dugout visitante y entregó la carpeta a Emilio Carrasquel, el gerente deportivo de los Cardenales.
Con ese simple acto, y sin ningún protocolo, Sucre aseguró su trabajo en las menores el año próximo y una invitación al campo de entrenamientos de las grandes ligas.
“Ayer le di el contrato, sólo faltaba la firma”, explicó Carrasquel, quien también es el coordinador de scouts de los Marineros de Seattle en Venezuela.
Tim Teufel, el manager de los melenudos, le dio la posición al nativo de Cumaná gracias a su sólida defensa.
“Es excelente recibiendo y soltando a las bases”, describió el estratega. Carrasquel coincidió: “Ese muchacho tiene un cañón en el brazo”.
Esas herramientas llevaron a Sucre a jugar en doble A las pasadas dos campañas y le tienen en el medio de la escena, bajo los reflectores no sólo ante la ausencia del grandeliga José Lobatón, sino por su propio esfuerzo.
“Mi desarrollo en la posición viene del tiempo que pasé trabajando con los catchers de los Bravos de Atlanta”, soltó el oriental. “Aquí también hay tremendos cátchers: Ramoncito (Cabrera), Juan Carlos Torres y (Raúl) Padrón. Y Lobatón tiene mucha experiencia de grandes ligas, puedo aprender mucho de él”.
Sucre tiene más solera de lo que muchos aficionados sospechan. Estuvo en los entrenamientos primaverales de las mayores los últimos dos años y, aunque no ha bateado mucho (su línea ofensiva de .249/.282/.345 hace recordar al Henry Blanco que crecía en las menores de los Dodgers de Los Ángeles), su mascota le permitió conseguir trabajo rápidamente, tras quedar en libertad esta temporada.
“Gracias a Dios, los Marineros me firmaron y terminé la campaña con ellos”, relató el jugador de 23 años de edad.
Sucre asegura haber trabajado duro para ganarse un lugar en el lineup de los capitalinos. Teufel asiente. Y aunque no le promete la misma cantidad de juegos cuando llegue Lobatón, está más que satisfecho.
“Es muy difícil encontrar buenos receptores”, advirtió el piloto. “Y Sucre es una gran adquisición para la organización”.
El manager Tim Teufel no escatima elogios para Jesús Sucre: “Es temprano todavía, pero ha hecho un gran trabajo detrás de plato”, sentenció el técnico
Jesús Sucre también cumple como scout de los Leones. O al menos, cumplió el jueves, al llegar de visita los Cardenales.
Erasmo Ramírez relató en la cueva del Lara que hace dos noches tuvo que cambiar su forma de lanzar, al ver cómo los bateadores del Caracas le atacaban los primeros dos pitcheos.
Para Ramírez, todo se debió al consejo de Sucre, su catcher en doble A, que conoce su afición a abrir casi siempre con recta.
“Es un receptor muy inteligente, bloquea bien, tiene buenas manos, agilidad y pasión”, señaló Pedro Griffol, manager crepuscular y director de operaciones de ligas menores en Seattle.
“Muchos receptores puramente defensivos llegan a las mayores, se adaptan al pitcheo y pueden jugar muchos años allí”, continuó el técnico. “Son los casos de Eduardo Pérez, Henry Blanco y muchos otros. Sucre nos ofrece mucho más que profundidad en las menores; puede ayudarnos arriba si sucede algo y ya tiene una invitación al spring training de grandes ligas”.
Publicado en El Nacional, el sábado 15 de octubre de 2011.