El ex grandeliga Henderson Álvarez tuvo una de sus mejores salidas del torneo en la jornada del martes. El pitcher retiró a los tres rivales que enfrentó y ponchó a un rival, pero salió lesionado.
El derecho no había logrado fusilar a ningún rival en sus últimas 13.1 entradas recorridas antes de enfrentar a los Leones del Caracas. Fueron doce presentaciones al hilo sin conseguir abanicar a ninguno de sus oponentes.
Para mala fortuna no pudo seguir apoyando al bullpen de los turcos después que sintiera un espasmo en la parte posterior de una de sus rodillas.
«Sufrió un espasmo en la región poplitea», explicó Antonio Balleste al departamento de prensa del club «Hasta ahora es el diagnóstico inicial. Sin embargo, será observado mejor. No hay lesiones de tejido ligamentoso, óseo ni muscular que implique pérdida de funciones».
No hubo más detalles del equipo pocas horas después de ocurrido el evento.
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Pero es una buena noticia que en primera instancia no se consiguiera ninguna lesión que tal pudiera afectar la continuidad del monticulista. Henderson Álvarez ya perdió buena parte de acción, hace un año, después de sufrir una fractura en el fémur. Aunque en esta ocasión no parece haber señal de alarma.
«Quiero informales que estoy bien», explicó el lanzador en su cuenta de Twitter. «No tengo nada grave. Seguiré de pie y dando lo mejor».
Por Marcos Grunfeld