Por Alexander Gómez
La fiesta de celebración de la exaltación de David Ortiz al Salón de la Fama terminó al final de la noche con una gran fiesta con las actuaciones de los merengueros Fernando Villalona y Sergio Vargas.
“Quiero dar gracias a Dios y a toda la República Dominicana por el apoyo que siempre me han dado. Los quiero y esto es de ustedes”, dijo Ortiz en su discurso de exaltación.
La actividad se llevó a cabo en Brewery Ommegang,con capacidad para más de 5000 personas en el poblado de Cooperstown. Y fue transmitido en vivo para República Dominicana por Telemicro, canal 5, y a través de la nueva plataforma panregional VIX.
“Gracias siempre por ser la Quisqueya, la bella. Nada comparado a eso”, proclamó Ortiz.
Los fanáticos del béisbol acudieron en masa a Cooperstown desde la República Dominicana. Y de todo el mundo para ver cómo se hace historia en la Ceremonia de juramentación. Que tendrá lugar en el Clark’s Sports Center, donde se le otorgó a Ortiz la inmortalidad del béisbol.
«¡Mi gente de la República Dominicana!», gritó para saludar a los cientos de dominicanos que acudieron al pueblo ubicado a 314 kilómetros (195 millas). Y tres horas con 47 minutos al oeste.
“Big Papi” se convirtió en el segundo bateador dominicano en ingresar a la élite del béisbol. Solo después de Vladimir Guerrero Sr., y el cuarto jugador dominicano en general. Uniéndose a los ex lanzadores Juan Marichal y Pedro Martínez.
“Quiero agradecer a Dios por darme la oportunidad de estar aquí y por haberme dado la alegría de haber transitado este camino. Este camino que me permitió estar aquí hoy y que ojalá sea inspiración para que todas pueden creer en sí mismos», indicó Ortiz.
Reconocido como embajador deportivo de la República Dominicana y amado en los Estados Unidos, América Latina, Asia y más allá. Asistió al Festival en Ommegang noche del domingo para celebrar este logro histórico junto con sus fanáticos, familiares y amigos.
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La leyenda de Big Papi ahora es inmortal
“Siempre he tratado de vivir de modo que tenga una influencia positiva en el mundo”, manifestó Ortiz. Quien con 46 años de edad se convirtió en apenas el 58vo pelotero elegido en su primer año en la papeleta. “Y si mi historia sirve de recordatorio, que sea que cuando uno cree en alguien se puede cambiar al mundo. Se puede cambiar su futuro, como tanta creyó en mí”.
“Es un honor encontrarme en este escenario», concluyó Ortiz. “No se puede pedir por más».
(Alexander Gómez)