Gleyber Torres extendió este martes a cinco su cadena de juegos con por lo menos un imparable, pero lo hizo a lo grande. Con un largo cuadrangular que ayudó a la victoria 5 por 1 de los Yanquis de Nueva York ante los Mellizos de Minnesota y a ser optimista con un despertar ofensivo.
Especialmente porque se trató de un swing perfecto. El infielder golpeó con fuerza un pitcheo que el abridor Bailey Ober ubicó en la esquina, pero que Torres la mandó por encima de la pared del jardín central.
Fue el único indiscutible en tres chances ofensivos legales para Gleyber Torres en el compromiso, pero le permitió llegar a cinco vuelacercas con 17 carreras remolcadas en la campaña. También llegó a 52 hits, con 27 anotadas, aunque todavía su promedio de bateo (.231) es bajo con un OBP de .308 que en Nueva York quisiera que aumentara.
Seguramente ambos guarismos empezarán a crecer con los indicios de recuperación del caraqueño. Torres ha ligado por lo menos un indiscutible en 11 de sus últimos 10 choques y ahora se reencontró con el poder con ese vuelacerca.
“En este momento está trabajando en ello”, dijo al New York Times el coach de bateo James Rowson sobre el venezolano. “Es una batalla, pero no hay sensación de pánico. Hay una sensación de urgencia más que de pánico. Es más bien, él quiere conseguirlo, está trabajando duro para conseguirlo, estamos tratando de llegar allí más rápido, o más temprano que tarde”.
Es algo que necesita el propio pelotero. Gleyber Torres será agente libre al terminar la zafra, por lo que necesita mejorar esos números para buscar un contrato multianual, ya sea con los Yanquis o en otra organización.
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«Pero todo se está moviendo mucho. Estoy tratando de estar más tranquilo en el plato. Simplemente trato de tener más consistencia en mi punto de contacto y lucho mucho para tener éxito”, cerró el infielder.
Foto: @Yankees
