Gregory Infante está en su cuarta campaña en la Liga Mayor, pero en esta oportunidad el manager Jackson Melián le cambió la vida, para mejor. «Recuerdo que en mis inicios fui abridor y el manager Buddy Bailey me cambió a relevista», dice el integrante de la rotación de Delfines de La Guaira.
Y es que el manager Melián modificó el rol del serpentinero caraqueño y en esta temporada le entrega la bola para abrir compromisos, confianza que el derecho agradece. Aún cuando exhibe récord de 0-1 en la zafra, su WHIP de 1.53 en cuatro encuentros, habla de su dominio a los 36 años de edad.
«Yo me estuve preparando en la pretemporada para abrir juegos y el manager Melián me dio la confiaza. Me siento muy a gusto con esta función, porque de niño fui abridor», indica Infante que en 15.1 innings ha recibido un cuadrangular, otorgado cinco boletos y ponchado a 11 contrarios.
WILSON ÁLVAREZ LO LLAMÓ
Cuenta el lanzador Infante que esta semana recibió una llamada importante. Era Wilson Álvarez, coach de pitcheo de las Águilas del Zulia en la LVBP, quien quería saber cómo se sentía un serpentinero que tuvo tres campañas en Las Mayores con los Medias Blancas de Chicago.
«Me llamó para preguntarme cómo me sentía como abridor, pero que las Águilas esperan que yo esté entre el sexto y séptimo inning. Yo lo único que le dije es que me dijeran con tiempo cuál sería mi rol, para prepararme en la pretemporada. Yo trabajo donde me necesite el cuerpo técnico», relató.
Gregory Infante cree que le quedan unos dos años más, antes de colgar los spikes. «Tengo un hijo de 12 años de edad que juega pelota, pero es catcher y me dice que quiere que yo siga en el beisbol. Todo también va a depender de cómo sienta el cuerpo», remata.
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Los Tiburones de La Guaira cambiaron a Infante junto a Aldry Acosta y Edwin Jiménez a las Águilas del Zulia en noviembre de la campaña pasada, El capitalino terminó con récord de 1-2 y efectividad de 6.06 en 16.1 entradas.
