EL EMERGENTE
Por Ignacio Serrano
Los Tigres hicieron un movimiento drástico la última semana, al enviar a un favorito de la afición, Carlos Tocci, a los Leones del Caracas.
Siete peloteros estuvieron involucrados. Y Aragua, en teoría, sacó la mejor parte en el aspecto numérico, pues adquirió al también jardinero Alexfri Plánez, al pitcher Elvis García, al infielder José Sánchez y al receptor e inicialista Wilfredo Giménez. En cambio, el catcher Gersel Pitre y el relevista Jorge Rondón partieron junto a Tocci rumbo a la capital.
La clave de este pacto, sin embargo, no está en la cantidad, sino en la calidad. Está en sacar cuentas para ver qué ganan los Tigres en esta transacción, sabiendo que en todo cambalache se pierde algo, como parte lógica de una negociación.
Veamos primero el precio pagado, porque es la voz unánime de aquellos a quienes no gustó la transacción. ¿Qué pierden los rayados al salir de esos tres hombres?
Tocci, como uno de los últimos jugadores franquicia, será echado de menos durante un tiempo, hasta que Plánez dé un paso al frente y se convierta en una figura en Maracay.
A mí, en particular, viéndolo desde afuera, me preocupa que el ex grandeliga mantenga un declive desde su gran campaña 2021-2022, la mejor de su historial.
Tocci es un estupendo jardinero central. Pero como no tiene poder ni roba bases, necesita mantenerse constantemente en circulación para ayudar a la ofensiva. Y no hablo únicamente de estas últimas temporadas en baja.
Su slugging de por vida en la LVBP es de .375, por debajo incluso de su promedio de embasado (.381). Contando todos los niveles y ligas donde ha jugado, apenas ha robado 65 bases, con 57 por ciento de éxito al salir en pos de una estafa.
Aunque su guante seguirá siendo de élite un tiempo más, pues es delgado, ágil y todavía cuenta 28 años de edad, su gran baza ofensiva, embasarse, viene retrocediendo. Pasó de .394 de OBP en la 2021-2022 (excelente) a .359 en la 2022-2023 (casi casi en la media del circuito) a .326 en la 2023-2024 (unos 40 puntos por debajo de la media).
Su average ha ido de .339 a .273 a .262, finalmente. Y su OPS se ha reducido de .816 a .685 a .623 en ese mismo plazo. ¿Significa que su final ya empezó? No necesariamente. En la Liga Mayor luce bien, hoy por hoy, pero hemos visto que grandes bates en la Liga Mayor luego producen menos en la LVBP. Quizás consiga un nuevo aire con los Leones. Se poncha poco, y eso pudiera ayudarle. Pero ya vimos cómo BUDDY BAILEY renunció a mantenerlo como primer bate, debido a lo arriba descrito. Y Tocci necesita embasarse 4 de cada 10 veces para no convertirse simplemente en un buen cuarto jardinero.
Gersel Pitre también tenía un lugar en el corazón de los aragüeños. Deja .350 de average en 4 campeonatos con los Tigres. Es todavía joven, a los 27 años de edad. Y es receptor. Pero esto último parece ser lo que atenta en su contra.
¿Por qué un bateador de .350 no jugaba todos los días con los bengalíes? Por la misma razón que Josmar Cordero, otro consumado bateador, tuvo problemas para consolidarse como titular con Cardenales y luego en Maracay.
Los managers no han sentido confianza en la defensiva de Pitre. Y Aragua siempre tuvo a un inicialista o un designado por delante de él, lo que le dejó como un arma a ser usada desde la banca. Con todo y sus buenos números y ser una estrella en la Liga Mayor, en la pelota invernal no ha podido dejar de ser un jugador de la reserva.
Más debatible es el sacrifico de Jorge Rondón. Es verdad que en las últimas tres justas ha permitido 45 carreras limpias en 51 innings (7.94 de efectividad). Y es posible que eso moviera a la gerencia a entregarlo al Caracas. La gran duda surge al ver sus estadísticas en México. Lo ha hecho bien allá, en estadios mayormente de bateadores, aunque ya tiene 36 años de nacido.
¿Pasó algo para que el alto mando de los Tigres le perdiera la fe a Rondón? Algo más allá de lo deportivo, se entiende. No, al menos públicamente. Pero la falta de fe podría deberse a su edad y sus malos resultados en Venezuela a partir de 2021. Y tenemos también a un Tocci que ha declinado, y a un Pitre que no ha sabido ganar tiempo de juego, posiblemente por su manejo de la mascota. En teoría, el sacrificio de Aragua no es tan grande, más allá del cariño que sentía una parte de la fanaticada por estos peloteros, en especial por el patrullero.
Esos tres, según las circunstancias descritas, podrían valer hoy lo que quizás llegue a valer mañana Alexfri Plánez. Porque este último es un prospecto real, que cuando ha estado sano ha repartido jonrones en las Menores: dio 16 en Clase A, 19 en Clase A avanzada, perdió 2023 por lesión y en 2024 ya desapareció 9 pelotas en Doble A.
Plánez es un adecuado outfielder, además. Puede cubrir el right e incluso el center. Más importante, y esto incrementa su valor, se ha reportado en los últimos años a la LVBP.
Por supuesto que en ese tiempo con el Caracas apenas bateó para .093 de average, con un cuadrangular en 40 choques. Frente a eso, mil veces mejor tener a Tocci, aunque siga su tendencia a la baja. Pero el prospecto apenas cumplirá 23 años en agosto. El futuro parece esperarle con brazos abiertos, siempre y cuando modere un poco los ponches y desarrolle mejor disciplina, para tomar más boletos.
Es verdad que Plánez todavía no está desarrollado como bateador. Pero un lineup con la fuerza de Cafecito Martínez, Yorman Rodríguez, Rafael Marchán y eventualmente Leobaldo Cabrera, más los prospectos Jesús Rodríguez y Plánez, puede ser muy peligroso. Especialmente si Alexi Amarista, Keyber Rodríguez y el recién adquirido Odúbel Herrera pueden embasarse con regularidad.
Wilfredo Giménez también puede aportar fuerza. Pero su rol, en principio, parece ser el que tenía Pitre: ayudar desde la banca y eventualmente detrás del home.
Porque Giménez ya en una primera pasantía con los Tigres enseñó un bate con potencial, sin poder jugar a diario como catcher. Y están también las otras dos piezas que ceden los Leones: el pitcher Elvis García y el infielder José Sánchez. Al igual que Giménez, no están llamados a priori a ser protagonistas principales.
García es un swingman con capacidad ponchadora y tendencia al descontrol. Los Astros lo dejaron en libertad hace meses. Tiene apenas 21 años de edad.
Sánchez cumplirá 24 el mes próximo. Defiende todas las posiciones del cuadro. Todavía no enseña mayor ofensiva, con promedios de .211/.299/.278 entre Novatos y Doble A. Los Nacionales también lo dejaron en libertad después de la última justa.
Tanto el uno como el otro parecen haber convencido al presidente de los Tigres, Víctor Zambrano al sumarse a los Centauros en la Liga Mayor. Zambrano también gerencia esa divisa. Y como no han jugado mucho allí, cabe concluir que el ejecutivo está confiando en su ojo para detectar talentos.
Aragua posiblemente está esperando haber conseguir en ellos a dos jugadores de bajo perfil que puedan a llegar a ser de ayuda. Les pasó con Keyber Rodríguez y en cierto modo con Ángel Aguilar. Ya veremos.
Todo esto permite sacar una primera conclusión: la clave para los bengalíes está en Plánez. Más allá de lo que hagan Tocci y compañía con el Caracas, Plánez puede ser una pieza decisiva por su potencial con el madero. Para eso necesita reportarse, cosa que hasta ahora ha hecho siempre. Y ya promete que lo hará con Aragua, también. Pero necesita igualmente tener éxito con el bate, algo que hasta ahora no ha podido conseguir en la LVBP. Si triunfa, acallará todo descontento. Pero mientras no marque diferencia, serán muchos los que seguirán recordando a esos tres que se fueron.
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Foto: prensa Tigres de Aragua