En Major League Baseball (MLB), julio es el mes en el que se completan la mayoría de los cambios. Equipos que no llegarán a la postemporada mueven a sus jugadores importantes pensando en el futuro y los que tratan llegar a playoffs quieren talento para llevar su roster a otro nivel.
Ahí entran cinco venezolanos que podría ayudar a esos clubes. Nombres como Jesús Luzardo, Elías Díaz, Luis Rengifo, Martín Pérez y Eugenio Suárez, quienes cuentan con la calidad y la trayectoria para garantizar una mejoría sustancial a cualquier nómina, sino que el estatus actual de cada uno los coloca en el mercado.
Así que hasta el 30 de julio es bastante probable que estos venezolanos aparezcan en distintos rumores en MLB. Serán de los principales jugadores que están disponible para que cualquier organización que desee potenciar su roster presente una buena oferta para quedarse con cualquiera.
RUMORES EN MLB
Jesús Luzardo: el zurdo de 26 años se encuentra lesionado y tiene efectividad de 5.00 en la campaña, sin embargo, el hecho de que no será agente libre hasta 2027 lo convierte en una pieza sumamente apetecible. Padres de San Diego y Orioles de Baltimore expresaron interés recientemente.
Elías Díaz: seguramente el venezolano que más posibilidades tiene de ser traspasado en MLB. Será agente libre al terminar la zafra y, con una línea de 307/.355/.446 con cinco jonrones y 28 remolcadas, funcionaría bien en muchos lugares. Los Yanquis de Nueva York, por ejemplo.
Luis Rengifo: el actual líder bate en toda la MLB y que no será agente libre sino hasta 2026, por lo que no pareciera existir mejor momento para que los Ángeles lo cambien. Numerosos clubes quisieran a un pelotero que puede jugar en todas las posiciones del infield y del outfield que además batea para .317 con OPS de .810.
Eugenio Suárez: vive la peor temporada de su carrera, aunque es un slugger contrastado y Arizona no esconde que está disponible. Por un precio sumamente bajo, cualquier equipo podrá incorporar a un jugador con 252 jonrones de por vida y .777 de OPS vitalicio.
Martín Pérez: el zurdo es un pitcher que tiene 300 juegos de experiencia en MLB. Su 5.28 de efectividad en la zafra no es positiva, pero es está abultada por una salida en la que concedió ocho carreras y en otra que permitió seis. Su recorrido y capacidad de trabajar múltiples episodios puede ser útil para todo contendiente que necesite pitcheo.
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Abraham Toro es otro nombre que también puede ser movido en MLB. El jugador de los Atléticos de Oakland vive una buena zafra con el madero. También puede jugar en varias posiciones, por lo que cualquier contendiente podría mostrar interés en el venezolano.
Foto: @Marlins
Que tiene A Toro estará lesionado hace días que no juega por qué?
lista de lesionados. Aquí la noticia: https://elemergente.com/2009/05/transacciones-de-los-venezolanos-en-el-sistema-mlb.html
Hola Nacho. Gleyber creo que es una fija su cambio. Abrazos.
Buen día Nacho. Creo que Gleyber es una fuerte posibilidad su cambio, ya que su equipo no le va q renovar el contrato. Abrazos.
Yo también lo creo, salvo por el detalle de que son los Yanquis y están en la carrera. Normalmente sales de algo que te sobra cuando ya no estás en carrera
Ignacio, quisiera saber como se calcula el war y porque el war positivo sumado al negativo no se suman, Muchas gracias.
Cada casa de estadísticas tiene su fórmula y lo explican en sus páginas (BRef y FGraph). Son fórmulas complejas, que abarcan defensiva, ofensiva, corrido entre las bases, y la defensa se apoya en recursos diferentes, lo que suele marcar también diferencias importantes entre ambas mediciones. Para más, hay un factor que favorece o desfavorece a los involucrados, según la posición que defiendan. Se llama factor posicional y supuestamente busca hacer justicia porque «vale más» el aporte desde el shortstop que el que puedas hacer como inicialista.
A mí el WAR me parece chévere, pero en modo alguno lo considero irrefutable. Sigo prefiriendo baremos que no incluyen la subjetividad que todavía tiene el WAR en sus distintas fórmulas. Y me sentí muy aliviado la primera vez (y las subsiguientes) en que Bill James argumentó lo mismo que barruntaba yo.